La directora de los Servicios de Salud, de la Secretaría de Salud del estado de Querétaro; Martina Pérez Rendón; aseguró que aún no existen los estudios y pruebas suficientes, para asegurar que el dióxido de cloro pueda ser un auxiliar para combatir el COVID-19.
Martina Pérez, explicó que a pesar de que hay algunas personas que sí lo recomiendan, y que inclusive circule un video de una clínica en Querétaro, que supuestamente lo ha empleado en sus pacientes con resultados positivos; ellos como autoridad sanitaria, no pueden recomendar su uso; ya que carece de estudios y de las certificaciones suficientes.
Tanto en este caso, como en algunos otros supuestos antídotos o remedios, que han surgido en las últimas semanas; su uso son responsabilidad única y exclusivamente de quien los consume, y recordó que actualmente hay grupos de expertos en todo el mundo, probando distintos métodos que ayuden a curar y prevenir esta enfermedad.
Cabe recordar que el dióxido de cloro, es un poderoso agente oxidante utilizado como blanqueador y desinfectante; incluso en el agua, el cual ayuda a matar bacterias y se emplea también, para descontaminar superficies industriales.
La FDA, ha asegurado que tiene el reporte de efectos adversos en algunas personas que lo han utilizado, como insuficiencia respiratoria, insuficiencia hepática aguda, ritmos cardíacos anormales, con riesgo de ser mortales; así como vómitos y diarreas severas y una destrucción rápida de glóbulos rojos.
