A través de un comunicado, la Secretaría de la Función Pública (SFP) dio a conocer que decidió imponer dos inhabilitaciones por 24 y 27 meses a la empresa Cyber Robotic Solutions S.A. de C.V.; propiedad del hijo del director de la CFE, Manuel Bartlett; además de dos sanciones económicas, las cuales en conjunto suman más de dos millones de pesos.
Lo anterior por haber vendido a las oficinas del IMSS en Hidalgo, ventiladores a sobreprecio; compra que al final fue cancelada por la propia Secretaría, la cual tuvo que devolver los insumos para «evitar un daño al erario».
Por esta acción, fueron suspendidos de su cargo cuatro funcionarios del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Hidalgo, por estar presuntamente coludidos en la autorización de esta compra, con el pretexto que urgía los insumos, explicó la dependencia en el comunicado.
Esta práctica se ha presentado de manera frecuente durante la pandemia, principalmente por proveedores privados que quieren continuar con antiguas prácticas según la SFP.
«Se informa con respecto a dos inhabilitaciones a Cyber Robotic Solutions S.A. de C.V., por 24 y 27 meses, respectivamente, así como de dos multas, que suman más de dos millones de pesos, a la misma empresa.
El pasado 17 de abril se le adjudicó de forma directa un contrato a la empresa hoy inhabilitada —misma que no produce insumos médicos—, con la justificación de que había una necesidad urgente de atender a enfermos de COVID-19 en Hidalgo. Las oportunas acciones de la Secretaría de la Función Pública evitaron cualquier daño patrimonial al Estado y revelaron que la contratación se sustentó en falsedades:
El precio ofrecido por la empresa estuvo fuera del rango del mercado. Así quedó demostrado por la compra, en el mismo momento, de equipos similares a otra empresa por un precio mucho menor, así como por el costo de los equipos adquiridos recientemente por la Cancillería y otras entidades del Gobierno federal.
La supuesta urgencia para adquirir los ventiladores en el IMSS de Hidalgo no tuvo sustento durante las fechas de la contratación. De hecho, los equipos jamás fueron utilizados en la entidad, así que la justificación de “entrega inmediata” resultó insostenible.
La empresa proporcionó información falsa con respecto a la supuesta disponibilidad inmediata de los equipos adjudicados. Los equipos se entregaron tarde, en abierto incumplimiento de las bases de adjudicación, y desmintiendo de nuevo la supuesta urgencia.
Ni uno solo de los 20 equipos entregados cumplió con las especificaciones técnicas contratadas. Se entregaron equipos viejos, usados y en mal estado: 11 estaban rotos y totalmente inservibles, tal y como ahora lo reconoce el propio IMSS».
La secretaria Irma Eréndira Sandoval, reiteró el compromiso del actual gobierno, por la transparencia y el combate a la corrupción.
«A lo largo de la pandemia se han supervisado más de dos mil procesos de contratación en el sector Salud y se continuará con esta revisión escrupulosa para asegurar que la emergencia no sea utilizada como pretexto para encubrir desfalcos al pueblo de México”.
