La rectora de la UAQ, Teresa García Gasca; lamentó que exista «malinchismo covidiano», entre las autoridades mexicanas.
Lo anterior explicó al dejar de lado a los científicos mexicanos que con mucho esfuerzo han intentado dar una opción real al tema de la pandemia desde sus inicios, a través de una vacuna propia, generada y producida 100 por ciento en México; existiendo actualmente al menos cinco proyectos avanzados y serios, que lo único que requieren es financiamiento para llegar a buen puerto.
Lo anterior traería grandes beneficio ya que no existiría desabasto, y se podría avanzar de manera rápida en el Plan Nacional de Vacunación; sin duda es algo costoso, pero García Gasca asegura que es tiempo de confiar en el talento y experiencia de investigadores y científicos mexicanos; que están a la altura de cualquier otro país del mundo.
«El gobierno mexicano no ha apoyado a sus propios proyectos vacunales. Desde el inicio de la pandemia, se hizo notar la importancia de desarrollar una vacuna propia que garantizara el abasto. Desde luego, no es algo sencillo, es costoso, pero ya contamos con uno de los ingredientes más importantes: el talento y experiencia de científicas y científicos mexicanos».
Añadiendo que no se está en contra de que se compren vacunas en el extranjero, sino que lo lamentable es que se deje de apoyar al talento mexicano.
«Comprar vacunas extranjeras está bien, lo que no es correcto es dejar de apostar a proyectos propios. Existen al menos cinco proyectos mexicanos de primer nivel, que avanzan lentamente ante la indiferencia ignorante del gobierno mexicano que únicamente ve afuera lo que podría desarrollar adentro».
Esta reflexión se da luego de que México se acerca a su cuarta semana sin recibir vacunas, (se espera que Pfizer restablezca el envío la próxima semana); y todavía no hay fecha para recibir la vacuna rusa Sputnik V.
A finales de enero, la UAQ logró recaudar a través de una campaña en redes sociales, un total de 2 millones 865 mil pesos para continuar desarrollando su vacuna contra el COVID-19, QUIVAX-UAQ; y dar inicio así la fase 3 de las pruebas. Aunque para el total del proyecto se requieren 5 millones de pesos.
